Uno de cada cuatro jóvenes salvadoreños no estudia ni trabaja.
En 2012, el 26 % jóvenes salvadoreños no estudiaba ni trabajaba (nini); es decir, una cuarta parte de la población joven no estaba acumulando capacidades para la vida laboral y tampoco se encontraba trabajando. Esto plantea un reto para quienes diseñan y toman decisiones con respecto a las políticas públicas para atender a este grupo etario. Con la cita de este y otros hallazgos, Ricardo Córdova, director ejecutivo de Fundaungo, presentó el estudio: “Los jóvenes nini en El Salvador” el 12 de mayo en un hotel capitalino.
Córdova compartió la definición utilizada para esta investigación “jóvenes entre 16 y 29 años, quienes no trabajan porque se encuentran desocupados o porque forman parte de la Población Económicamente Inactiva, y que no estudian ni asisten a un centro de formación o capacitación” ya sea por falta de recursos económicos, por falta de oportunidades o porque se dedican a labores relacionadas con el trabajo doméstico no remunerado. La definición empleada por Fundaungo se basa en la Ley General de Juventud, el Código de Trabajo, la categoría de actividad económica y la condición de estudio o formación de los nini en un sentido amplio, explicó.
La investigación, realizada por Francisco Bolaños y coordinada por María Elena Rivera, fue desarrollada entre 2013 y 2014 con base en información de la Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples (EHPM) de 2012, elaborada por la Dirección General de Estadística y Censos (Digestyc).
El perfil de los nini
Para perfilar a los jóvenes con respecto a las variables de educación y empleo, Fundaungo los clasificó en cuatro grupos:
- Jóvenes que solo estudian.
- Jóvenes que solo trabajan.
- Jóvenes que estudian y trabajan.
- Jóvenes que no trabajan ni estudian
Con respecto a las características demográficas, cinco de cada 10 ninis (51 %) tienen entre 19 a 24 años, tres de cada 10 ninis tienen entre 25 a 29 años (29.7 %) y dos de cada 10 ninis tienen entre 16 a 18 años (19.3 %). Es decir, ocho de cada 10 ninis son mayores de edad (19-29 años), y solo dos de cada 10 ninis se encuentran en las edades que corresponden a la educación media. La distribución de los ninis en cuanto al sexo muestra que ocho de cada 10 ninis son mujeres (79.9 %) y dos de cada 10 (20.1 %) son hombres, es decir, que la mayoría de jóvenes nini son mujeres.
A partir de esta clasificación y cruce de datos se encontró que en 2012, el 23.2 % de los jóvenes salvadoreños solo estudiaba, 43.6 % solo trabajaba, 7.2 % estudiaba y trabajaba y 26 % no trabajaba ni estudiaba (nini). Es decir, aunque dos de cada tres jóvenes se encontraban ya sea solo estudiando o solo trabajando (66.8 %) y una menor proporción trabajaba y estudiaba al mismo tiempo (7.2 %), los datos de la EHPM 2012 muestran que una cuarta parte de los jóvenes (26 %) es nini.
En otras palabras, uno de cada cuatro jóvenes no se encuentra formándose ni acumulando capacidades para la vida laboral y tampoco se encuentra trabajando.
Córdova sugirió, a partir de los hallazgos, que no se debe de considerar a los ninis como un grupo homogéneo y, por lo tanto, formular políticas públicas orientadas a los distintos grupos.
De hecho el estudio propone la clasificación de los ninis en cinco grupos frente a su condición respecto del no trabajo y de no estudio, para los que a través de pruebas estadísticas y un modelo de regresión logístico multinomial se comprueban sus diferencias y la pertinencia en su separación, lo que pueden aportar para futuros análisis. Invitó a reconocer la heterogeneidad de este grupo y a realizar investigaciones cualitativas para “profundizar en el conocimiento de las barreras de acceso a la educación y al empleo a las que se enfrentan estos jóvenes”.
Los hallazgos del estudio fueron comentados por Yeymi Muñoz, directora general del Injuve; Carlos Sáenz, director general de coordinación de gobierno y cooperación internacional de la Secretaría Técnica de la Presidencia (STPP); Carmen Aída Lazo, decana de economía negocios de la ESEN; y por William Pleités, director ejecutivo de Fomilenio II. Al evento asistieron más de 200 invitados, entre funcionarios, representantes de centros de pensamiento, de organismos no gubernamentales nacionales e internacionales y de asociaciones de jóvenes, académicos, representantes de agencias de cooperación y periodistas.